1. «Para mí, una obra de ficción solo existe en la medida en que me proporciona lo que llamaré lisa y llanamente placer estético, es decir, la sensación de que es algo, en algún lugar, relacionado con otros estados de ser en que el arte (curiosidad, ternura, bondad, éxtasis) es la norma. Todo lo demás es hojarasca temática o lo que algunos llaman Literatura de Ideas, que a menudo no es sino hojarasca temática solidificada en inmensos bloques de yeso cuidadosamente transmitidos de época en época, hasta que al fín aparece alguien con un martillo y hace una buena rajadura a Balzac, a Gorki, a Mann.» ( Vladimir Nabokov Sobre un libro llamado Lolita)
2. » El sentido no emerge de la Historia sino de la ficción» ( Chus Martinez Felicidad clandestina. ¿Qué queremos decir con investigación artística?) Mirar investigación
3. » Feliz el novelista que consigue conservar una auténtica carta de amor recibida durante su juventud para insertarla en una obra de ficción, e incrustarla como una limpia bala en una masa de carne fofa, para dejarla bien segura alli, entre vidas espurias.» ( Vladimir Nabokov, citado por Zadie Smith en Con total libertad, pag 339)
4. » Vivimos en un mundo gobernado por ficciones de toda índole….Vivimos dentro de una enorme novela…la ficción está ya ahí. La tarea del escritor es inventar la realidad» ( Ballard, citado por Zadie Smith en Con total libertad, pag 236)
5. » Existen tres fuerzas impersonales-tres espiritus guardianes- que planean sobre el parque de atracciones de la ficción; están ahí para ayudarte; son tus amigos.
Primero: el género. Si escribes westerns, tendrás el apoyo tácito de todos aquellos que se sienten atraídos por los westerns.Si escribes novela histórica, tendrás el apoyo tácito de todos aquellos que se sienten atraídos por la novela histórica. Si escribes realismo social, tendrás el apoyo tácito de todos aquellos que se sienten atraídos por la sociedad y la realidad: un colectivo bastante más amplio
Segundo: la estructura. la prosa de la ficción, si tiene energía, tenderá a la testarudez- La estructura está ahí para mantenerla a raya. Se trata de desmenuzar el relato y repartirlo según un patrón satisfactorio. una vez formado el patrón, puedes tener la seguridad de que el edificio no se vendrá abajo de la noche a la mañana, el andamiaje está en su sitio.
Tercero: El subsconciente: vacilo a la hora de hablar de este tema, pues no quiero asustarte…nadie entenderá jamás el subsconciente; pero se puede aprender a complacerlo. Hoy en día, cuando el obstáculo se anuncia, no me doy de cabezazos contra la pared; me largo a hacer otra cosa…las piernas se me estiran y me alejan del escritorio.. en general de la silla a un sillón, donde me siento y leo para que corra el tiempo. pasará una hora, pasará un día, una noche, dos días, tres noches, hasta que me sorprendo de nuevo en la silla, porque las piernas me han llevado a ella…Ello significa que el camino es transitable ( Desde dentro Martin Amis pags- 485-86)
6. » La mayoría de las ficciones se originan en el subsconciente. Muy a menudo percibes su llegada. Es una sensación exquisita. Nabokov lo llama «palpitación»; Updike , «estremecimiento»: una sensación de pausa elocuente. El subsconciente te avisa: has estado incubando algo sin saberlo. De ahí procede la ficción: de la angustia silenciosa. Y ahora de da una novela para que la escribas.» (Desde dentro Martin Amis, pag 486)
7. » La ficción tal y como se concibe actualmente, la novela y el relato tal y como han existido desde el siglo XVIII, ofrece una de las mejores maneras, dejando a un lado la experiencia, de entender a la gente distinta de uno» (Contar es escuchar Ursula K Le Guin)
8. » Henry James escribió que la ficción no es lo que pasó, sino lo que debió haber pasado.» (¿Hay alguien ahí? Peter Orner, pag215)
9. «La única razón por la que empecé a escribir ficción fue para olvidarme de mí. Dios sabe lo que me cuesta.. Pero, parafraseando a Welty, la ficción es el gran arte de mirar el mundo a través de la mirada de los otros. Me parece que la demanda de que los escritores hablen sobre sí mismos fuera de los libros transgrede esta máxima sagrada de Welty. Inventar personajes, personas que no existen, e introducirlas en un mundo de por sí abarrotado e indiferente es un acto de fe, uno de los pocos actos de fe sinceros que me quedan.» (¿Hay alguien ahí? Peter Orner)