Claro del bosque

1. » El claro del bosque es un centro en el que no siempre es posible entrar, desde la linde se le mira y el aparecer de algunas huellas de animales no ayuda a dar ese paso. Es otro reino que un alma habita y guarda. Algún pájaro avisa y llama a ir hasta donde vaya marcando su voz. Y se la obedece; luego no se encuentra nada, nada que no sea un lugar intacto que parece abierto en ese solo instante y que nunca más se dará así. No hay que buscarlo. No hay que buscar. Es la lección inmediata de los claros del bosque. no hay que buscarlos, ni tampoco a buscar nada de ellos. nada determinado, prefigurado, consabido. Y la analogía del claro con el templo puede desviar la atención». (Maria Zambrano. Claros del bosque 1977