Oficio

1.»Así es mi oficio. Normalmente no da mucho dinero, es más, para vivir siempre hay que hacer otro trabajo al mismo tiempo. A veces también da un poco: y tener dinero gracias a él es una cosa muy dulce, como recibir regalos del ser amado. Así es mi oficio. No sé mucho, digo, sobre el valor de los resultados que me ha dado y que podría darme, o mejor dicho, de los resultados obtenidos conozco el valor relativo, aunque no el absoluto. Cuando escribo algo, suelo pensar que es muy importante y que soy una gran escritora. creo que a todos les ocurre igual. Pero hay un rinconcito de mi alma donde sé muy bien y siempre lo que soy, es decir, una escritora pequeña, muy pequeña. Juro que lo sé. Pero no me importa mucho.» (Natalia Ginzburg Las pequeñas virtudes. pag. 103) Mirar escribir

2. » Mi oficio es escribir, y lo sé bien y desde hace mucho tiempo. Espero que no se me interprete mal. no sé nada sobre el valor de lo que puedo escribir. Sé que escribir es mi oficio. Cuando me pongo a escribir, me siento extraordinariamente cómoda y me muevo en un elemento qu me parece conocer extraordinariamente bien, utilizo elementos que me son conocidos y familiares y los siento bien firmes en mis manos. Si hago cualquier otra cosa, si estudio un idioma extranjero, si intento aprender historia, o geografía, o taquigrafía, o intento hablar en público, o hacer punto, o viajar, sufro y me pregunto continuamente cómo harán los demás estas cosas……Y me siento ciega y sorda y noto una nausea dentro de mí. Por el contrario, cuando escribo, no pienso nunca que pueda haber una forma mejor de la cual se sirven otros escritores. No me importa nada lo que hagan otros escritores…» (Natalia Ginzburg Las pequeñas virtudes. pag.83) Mirar escribir